Con la amenaza de un posible rebrote del Covid-19, se hace imprescindible potenciar la enseñanza telemática, tanto en lo referente a la impartición de clases y los procesos de formación como en la realización de exámenes.
En este sentido, cada centro educativo, o incluso cada profesor, ha optado por su propio método, muchas veces enfocado más a la dinamización de los contenidos y la forma de impartir las clases que a optimizar el proceso de evaluación. Esto hace que se dé la curiosa circunstancia de centrar todos los recursos en el proceso, dejando en el aire la comprobación de los resultados. La evaluación a distancia con rigor y garantías sigue siendo un problema.
Existen plataformas dedicadas a la supervisión y vigilancia de los exámenes online, incluyendo entre otros el reconocimiento facial o la utilización de videollamada con cámara y micrófono abierto durante la sesión, que registran todos los movimientos del estudiante durante la evaluación, creando gran tensión en el alumnado y dudas en cuanto a la invasión de su privacidad.
Un informe realizado por el Ministerio de Universidades refleja que actualmente en España la supervisión de exámenes online se realiza de 3 maneras:
mediante técnicas de reconocimiento facial y de la voz.
con supervisión en directo con cámara y micrófono.
con ausencia de supervisión directa, entrando el alumno con su usuario y contraseña a una plataforma donde realiza el examen.
Sin embargo, no debemos concentrarnos únicamente en la supervisión, sino que también la metodología y el formato del examen pueden ayudar a evitar el fraude. El Ministerio recomienda en primer lugar no utilizar preguntas que únicamente impliquen memorización de contenido, siendo más efectivo el análisis o la reflexión. Una opción muy extendida es la utilización de un software para una elección de preguntas aleatorias, dando lugar a exámenes diferentes, además de la limitación del tiempo de realización del examen.
La situación actual demuestra que las universidades están más preocupadas por los mecanismos de control y vigilancia sobre el alumnado que en adaptar su docencia al sistema de evaluación presente y asegurarse de que los estudiantes aprendan. Esto está dando lugar a exámenes de una dificultad desproporcionada o exámenes prácticamente imposibles de completar en el tiempo establecido. Se trata de un reconocimiento tácito de las limitaciones de los sistemas de control, pues pese a implementarlos, es necesario hacer exámenes que dificulten que los alumnos cometan fraude, ya sea por la estructura del mismo o por el tiempo permitido para contestarlo.
Teniendo en cuenta todos estos problemas parece necesario dar un paso adelante y cambiar la visión actual de cómo realizar los exámenes online. TESTUALIA es un software que revoluciona la creación de exámenes tipo test: aplicamos inteligencia artificial a la creación de test aleatorios para que todos los test sean diferentes pero homogéneos en nivel de dificultad, taxonomía de las preguntas y distribución de contenidos.
TESTUALIA nos permite relajar los sistemas de control ya que los estudiantes no tendrán incentivos en intentar copiarse al tener cada uno un examen con preguntas diferentes, pero siempre con el mismo nivel de dificultad. TESTUALIA desincentiva la copia y crea un ambiente más relajado, tanto para el profesor como para el estudiante. El profesor podrá crear de forma sencilla y automática test ilimitados, diferentes entre sí pero de la misma dificultad y distribución taxonómica. El alumno tendrá que conocer bien la materia y de nada servirá aprenderse la teoría o tratar de copiar de los apuntes.
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